martes, 23 de agosto de 2011

Inconexos.

Supongo que esto es un adiós,
aquella noche en el KFC,
empezó la discusión,
los trapos sucios y mejor guardados empezaron a relucir,
nuestras bocas borboteaban veneno,
la Pepsi encolerizaba nuestras sucias gargantas,
tus ojos como llamaradas,
mis palabras resonaban en tus tímpanos como truenos,
aquella noche el vómito de contradicciones estuvo al rojo vivo,
el calor en nuestros cuerpos iba creciendo,
la furia mezclada con el olor del ketchup,
tus labios moviéndose al compás de tus manos,
mi parpadeo al compás de tus ojos,
nuestros recuerdos tirados encima de la mesa,
las reclamaciones mutuas abrasaban,
aquella noche en el KFC,
la noche en las que las caricias se quedaron en el garaje,
en la que la pasividad estaba sentada a tres mesas de la nuestra,
aquella noche,
fue en la que dos planetas chocaron.



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